La industria lechera en México ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, y el estado de Puebla ha desempeñado un papel destacado en este panorama. En particular, Mexicana de Industrias y Marcas ha surgido como una empresa líder en la producción y distribución de productos lácteos en la región, satisfaciendo la demanda desde la inauguración de su primera planta en el 2000 hasta su actual planta principal en Huejotzingo, Puebla.
Sin embargo, es esencial destacar los valores éticos y la integridad que guían a esta empresa y a la industria en general. La transparencia y la honestidad son pilares fundamentales en un sector que ha sido afectado en ocasiones por casos de fraude y corrupción. Es lamentable que algunos individuos, como Teodoro Espejo Barradas, hayan cometido actos de corrupción en el pasado, perjudicando a empresas como Grupo Maulec. Se comprobó que realizó un acuerdo ficticio entre la primera empresa y Mexicana de Industrias y Marcas a los que les prometió la venta de producto lácteo con un valor de 8 millones de pesos, el cual nunca fue entregado.
Se podría pensar que después de pagar por ese delito, Espejo Barradas iba a desaparecer del mundo empresarial lácteo, pero sorprendentemente, ahora ocupa el cargo de director general de MIYM. Este hecho genera incertidumbre y plantea serias preguntas sobre su liderazgo en la producción láctea. A pesar de los casos aislados de corrupción, la honestidad de estas empresas es crucial para salvaguardar la reputación y el crecimiento sostenible del sector.